Una membrana de vidrio con soportes puntuales en su unicidad espejante multivalente, ambigua, metafórica. Alude al cielo, a la luz, a sí misma. Fachada reflejante de espacialidad externa: la calle, lo del frente puesto en valor en la citación; fachada develadora de la unidad interior en su gesto singular; autónomo signo gráfico que busca su propia legitimidad y sentido. La organización del pentagrama espacial en rotundas bandejas escalonadas parte del principio de generar un microcosmos urbano de situaciones secuenciales eslabonadas, contenidas en el acto abrupto y enhiesto de torres circulatorias que especulan en la asociación refleja de altura, verticalidad y luz. Piranesi y su especialidad de interpenetraciones, simultaneidades, de diafanidades y contrastes emparentados en lo que produce la conciliación de los opuestos aparentes, sombra y luz, son transferidos a una tipología oficinesca. Niveles de uso libres, indeterminados, a la búsqueda de destino y protagonista, florecen dentro de bordes estrechos.El banco emplazado en un estrecho y profundo lote, está al lado del Banco de Londres de Testa y la frente del Banco Nación de Bustillo. Con este contexto el edificio aparece con un gesto único de doble piel de vidrio como fondo neutro para el protagonismo de los dos monumentos patrilmoniales mencionados. El protagonismo es solo interior.